SemblanzasAficionado a la apicultura

Ana Leonor Paiz H.5 años 13536 min

Carlos Pérez Alemán dejó la agronomía para dedicarse a las abejas

 

Yo empecé con cinco cámaras de cría que me vendió un tío, dice don Carlos Pérez, sobre cómo fue que se sumergió en el mundo de la apicultura, hace unos cuatro años atrás. Ahora tiene 52 colmenas en su finca agroecológica Las Gardenias, ubicada en Ticuantepe.

Don Carlos nos explica que existen tres tipos de colmenas. “1. Núcleo que es una colmenita de solo cinco marcos que sirve para reproducir las colmenas. 2. Cámaras de cría, que es el alza inferior que es donde está el nido de cría de las abejas. Y 3. Colmenas de producción, que son colmenas con 10 alzas (o pisos).

Él recomienda que cada vez que se divide una colmena, es mejor hacerlo por núcleos para evitar que las abejas regresen a su colonia original. “Hay que tener pericia para hacer las alzas que las abejas que quedan en la parte dividida no regresen al original”, enfatiza.

La lección aprendida por don Carlos, en estos cuatro años que tiene de estar trabajando las abejas, es que en invierno no hay que hacer alzas porque se corre riesgo de que contraigan plagas. “El primer año perdimos una colmena, todo el enjambre se fue. Ahora lo que hacemos es que repartimos panales con miel y crías entre colmenas”, explica.

Después de esa experiencia, lo más difícil que le ha tocado vivir fue recuperar sus colmenas de la plaga de escarabajo de la colmena. “Descubrimos su ciclo de vida y es importante sacar las larvas que deja dentro de la colmena. Nosotros hacemos dos cosas: 1. Atrapamos a los escarabajos adultos que están dentro de la colmena, y 2. Ponemos cal en el suelo donde está la colmena para que la larva que caiga termine ahí su ciclo”, indica.

Producción de propóleo

Además de producir miel, don Carlos está procesando un subproducto de la colmena: los propóleos, con los cuales hace una tintura con fines medicinales.

Los propóleos son unas mezclas resinosas que obtienen las abejas de las yemas de los árboles, exudados de savia u otras fuentes vegetales y que luego procesan en la colmena como sellante de pequeños huecos, en ocasiones mezclado con cera y para barnizar todo el interior de la colmena. Tomado de https://es.wikipedia.org/wiki/Prop%C3%B3leos

Nos explica que el propóleo tiene muchas propiedades medicinales. Es antibiótico (fungicida y bacteriana), cicatrizantes, antiinflamatorias, analgésicas, antialérgicas y anestésicas, entre otras propiedades y beneficios.

“Nosotros hemos aprendido a extraerlo y hacer una tintura, que luego mezclamos con miel y producimos un jarabe. Entonces de la colmena sacamos tres cosas: miel, la tintura de propóleo y el jarabe miel con propóleo”, indica.

Don Carlos, como ingeniero agrónomo, nos da algunas recomendaciones para establecer un apiario. “Lo primero es buscar la zona, que sea un lugar donde no haya mucha agricultura, donde usan muchos plaguicidas, porque eso mata a las abejas. Que sea una zona bien arborizada, con diversidad de árboles, y que siempre tengan flores”, finaliza.

Ana Leonor Paiz H.

Directora Editorial Licenciada en Periodismo de la Universidad Centroamericana (UCA). Comunicación Social. Estrategias y Planes de Comunicación. Social Media. Marketing Digital. Enfoque de Género.